El día prometía lluvia y viento… no obstante los «Garbanceros» nos animamos y junto con un gran número de zaragozan@s de diferentes lugares del mundo, estábamos dispuestos a pasar un buen día de reivindicación, fiesta y encuentros.
Entre nubes, cervezas y alguna que otra gota de lluvia transcurrió la mañana. El río de personas que inundaba el parque no cesaba de recorrerlo en todo los sentidos. Muchas personas se acercaron al puesto: unos interesados por la idea del Grupo de Consumo, preguntaron sobre cómo hacerse socio, otros indagaban por los precios de los productos de la exposición o directamente los querían comprar.Los socios y simpatizantes asistentes disfrutamos de un muy buen día de acercamiento, compañerismo y amistad.
Un picoteo, una comida de «traje» y unas buenas tertulias de sobremesa completaron esta estupenda jornada que deseamos tenga su continuación en la próxima… «Fiesta del Sol».
¡Si te la pierdes, tu veras!
Historia
La Cincomarzada — Las Guerras Carlistas
Muchos jóvenes zaragozanos, se habrán ido enterando, en estos últimos años, del porqué de la fiesta local zaragozana del Cinco de Marzo. Hay que remontarse a 1838 y a un enfrentamiento civil entre liberales y carlistas aragoneses. Espero que se va abriendo paso, poco a poco, la recuperación de esos retazos de la memoria y dignidad comunes.
En 1833 moría sin descendencia masculina Fernando VII siendo nombrada sucesora su hija Isabel bajo la regencia de su madre María Cristina, cercana a liberalismo. No todos los sectores aceptaron la sucesión por vía femenina, sobre todo el absolutista que nombró sucesor al hermano de Fernando, Carlos María Isidro, tomando el nombre de Carlistas. Comenzaba una guerra civil que duraría hasta el año 1840.
La madrugada del 5 de marzo se concentró a las afueras de Zaragoza una partida del ejercito carlista de 3000 soldados de infantería y 30 de caballería dirigidos por Juan Cabañero y Esponera; las tropas carlistas aprovechando la madrugada, entraron en la ciudad como le vino en gana, sin ningún tipo de resistencia por las tropas isabelinas que defendían la plaza.
04:00h Tropas carlistas entran en Zaragoza con dos escalas que les lanzan del interior por la Puerta del Carmen, posesionándose de ella y al poco de la de Santa Engracia. Tres batallones ocupan el Coso, la calle Predicadores, La Magdalena, la Plaza del Mercado, San Pablo, la Plaza de San Felipe, el arco de San Roque, y la calle de San Gil. Cabañero, general carlista, queda con un batallón y la caballería en Torrero. La llegada de las tropas pilló desprevenidos a los zaragozanos que se despertaron con las vivas a Carlos V, Cabañero y a la Inquisición.La guarnición liberal, al mando de Esteller, hizo el ridículo más completo, militarmente hablando. los protagonistas de la acción principal fue una vez más el vecindario zaragozano. El cual, como muchas veces en aquel siglo, llegó por sí solo a donde no llegaban quienes tenían el deber de hacerlo.
04:45h La reacción de los vecinos zaragozanos no se hizo esperar, desde sus ventanas, comenzaron a lanzar toda clase de muebles, trastos y enseres para crear barricadas y entorpecer el paso a los carlistas mientras tanto, los soldados isabelinos ya recuperados de su torpeza, cargaban contra los invasores. Desde la Real Audiencia y casas contiguas se hace fuego contra los carlistas. Combates en torno al arco de San Roque. Vecinos, milicianos nacionales y militares combaten a las tropas carlistas, incluso lanzando tejas y otros objetos contundentes desde los tejados y ventanas de las casas. Combates en la Plaza del Mercado y calle de San Pablo.
05:00h Combates a lo largo del Coso y el barrio de San Pablo. Las mujeres de nuevo jugaron un papel importante lanzando agua y aceite hirviendo desde sus ventanas al paso de las tropas de Cabañero. Ante la dura resistencia de su población, el ejército carlista abandonara el casco antiguo de la ciudad, huyendo hacia las puertas.
06:00h Los carlistas retroceden, Unos 600 se atrincheran en la parroquia de San Pablo, el resto huye por las puertas del Carmen y Santa Engracia, que recuperan los isabelinos. Unas decenas de carlistas intentan huir por el Portillo pero son muertos o apresados. Los que resisten en San Pablo se rinden y quedan prisioneros.
09:00h La ciudad amanece en paz. Cabañero ha retirado sus tropas a varias leguas de Zaragoza.Dice un dicho popular que la reacción heroica del pueblo sorprendió a Cabañero desayunando, teniendo que huir a toda prisa sin terminarlo mientras los zaragozanos le decían “Que se te enfría el chocolate”.
En esta heroica acción, la ciudad y sus ciudadanos, lograron el hermoso título de «Siempre Heroica»y las ramas de laurel para su escudo de armas por defender sus vecinos la legalidad constitucional.